Asesinaron a Santiago Urbani, hijo de Julia de Rapazzini

lunes, 12 de octubre de 2009


La Argentina alcanzó tal grado de cotidianeidad con la inseguridad que los delitos ya ni se denuncian.

Robos al voleo de celulares, carteras, billeteras, relojes y demás episodios de violencia de la vida cotidiana ya ni figuran en la estadística oficial, para tranquilidad de un gobierno que prefirió disimular su falta de interés para combatir el crimen, en lugar de implementar una política eficaz.

Quienes hablan de inseguridad son estigmatizados por el kirchnerismo como "de derecha", "los que quieren que vuelva Videla", las "clases privilegiadas" que no entienden que la pobreza es un problema social y que cuando se termine -es decir, nunca- desaparecerán por arte de magia los crímenes.

Parte del problema central de las fallas en la lucha contra la inseguridad está vinculada con una ausencia del reconocimiento del problema, una práctica habitual del gobierno del matrimonio Kirchner, porque consideran que asumir lo negativo de la realidad “pianta” votos.

Mientras tanto, nos encontramos con el caso del asesinato en Tigre. Santiago Urbani, un chico de 18 años, buen hijo, buen hermano, estudiaba y trabajaba. Tenía una vida y una familia. Hoy esa familia está totalmente destrozada. Su madre a quien conozco y quiero, Julia Rapazzini, no tiene consuelo posible. ¿Cómo seguir adelante después de presenciar la ejecución de un hijo? Esa pobre madre ya no tendrá paz nunca más en su vida. Se siente la impotencia, el desconcierto, la desolación y el desgarro de perder un hijo en esas circunstancias tan evitables.

Estuvimos en el entierro para acompañar a Julia y Florencia en su inconmensurable dolor. La opresión que sentían no les permitía caminar, estaban estáticas frente al féretro de su bien amado hijo y hermano. En un momento Julia casi se desmayó, trató por todos los medios ser fuerte para sostener a su hija pero su cuerpo no lo resistía.

En desgarradoras declaraciones realizadas en la puerta de su casa, Julia recordó a su hijo Santiago como un ser "adorable", "estudioso" y que fue su sostén desde que su marido murió años atrás, también a consecuencia de un hecho delictivo.

"A mi me arruinaron la vida, sólo me queda mi hija" "Lo digo sinceramente, será emoción violenta, desconozco el término, pero me voy a ir a estudiar tiro, me voy a comprar un arma y, si salen, los voy a matar yo, aunque tenga que ir presa el resto de mi vida", qué otra cosa puede sostener una madre desesperada y ahogada en lágrimas.

“Me tendrían que haber matado a mi y no a él” "Yo perdí a mi marido y a mi hijo, tengo una hija ahora y lo único que pienso es que me quiero ir del país, en realidad me quiero morir, pero todos me dicen que tengo que vivir por mi hija, y será así, me quiero ir del país, no quiero más nada", señaló entre lágrimas Julia.

“Soy trabajadora del Estado y no podemos más. ¡No podemos seguir viviendo así!", exclamó "Se murió en mis brazos, a mí me tendrían que haber matado, no a él, yo era la grande, no a mis hijos, una madre no está preparada para esto", concluyó

Después tenemos que oír al gobernador Daniel Scioli hablando de "bestias", al intendente de Tigre Sergio Massa echándole la culpa a dos policías que se quedaron dormidos y a la Casa Rosada sin decir palabra, porque total consideran que es un problema de la provincia de Buenos Aires y Cristina Kirchner es la presidenta de...la India.

En la Argentina, toda apelación a mayor seguridad es desvirtuada con la "ideología" del escrache que el kirchnerismo implantó en el país.

Pero el país va perdiendo de a poco el sentido de autoridad.

¿Está mal que los ciudadanos pidan seguridad, que no nos maten a nuestros hijos, además de salud, educación y empleo?

¿Cuándo se implementará una política seria donde nos cuiden y discutan en el congreso cómo implementarlo en lugar de dar el debate de la ley de medios?

¿Es tan complicado destinar unos cientos de millones de pesos a este fin luego de que se está dispuesto a malgastar 600 millones anuales para dar fútbol gratis?

La Presidenta debería entender que el principal problema de la Argentina es, desde hace rato, la inseguridad, un drama nacional insoportable e insostenible, pero que la ausencia de una política para combatirla, por prejuicio, hizo que se acentúe durante los últimos años.

3 comentarios:

Lucía Tort Oribe dijo...

Lo que estamos viviendo es lamentable. Lo que está sufriendo Julia y su familia podemos estar sufriéndolo mañana otros. Lo trágico de ésto es que la gente no se alarma hasta que le llega el caso de alguien conocido. Por eso propongo que hagamos algo... algo para cambiar de una vez por todas el curso de las cosas. Sé que parece utópico, pero prefiero la utopía al quietismo. Propongo hacer una marcha por la paz y pedir justicia. Se que ya hubieron muchas marchas, pero creo que levantándonos contra la injusticia es la única forma de hacer cumplir nuestros derechos, los derechos de la gente común... derechos que a la Sra. Presidenta se le olvida que también son DERECHOS HUMANOS.

Sarita dijo...

Gracias por tu compromiso Lucía, espero que más gente jóven se involucre y haga valer sus derechos ante los dirigentes.

MARITA PISANO COSTA dijo...

SARITA, MUY BUENO TU ARTICULO Y EN CUANTO A QUE LA PRESIDENTA ES LA "PRESIDENTA "DE LA INDIA TE DIRIA QUE LOS INDUES ¡TAMPOCO !SE MERECEN A QUIEN SOBRE LA POBREZA DE LA GENTE LEVANTA NADA MAS QUE SU SED DE VENGANZA Y ENRRIQUECIMIENTO PROPIO.LEJOS DE PROTEGER LA VIDA DE LAS PERSONAS ES COMPLICE DE LO QUE OCURRE POR QUE EL QUE CALLA OTORGA, CREO QUE A ESTAS ALTURAS SOLAMENTE LE QUEDA PEDIR PERDON A DIOS, LOS HUMANOS NO CREO QUE SEAMOS TAN BUENOS COMO PARA PERDONARLA.